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Quienes quieran contribuir a la salida a nuestra situación bien harían en facilitar todo tipo de negociaciones que conlleven a ese objetivo. Hacer lo contrario fortalece a quienes usurpan posiciones pues así nada tienen que explicar.
Leo por las redes que un grupo de connacionales que ejercen como diputados, consecuencia de la elección del pasado 6 de diciembre viajaron a Europa a los efectos de tener reuniones con sus homólogos de la Unión Europea. Observo asimismo que no se les recibió formalmente y que quienes lo hicieron fueron integrantes de la oficina que gerencia el señor Borrell.
Me entero asimismo por esa vía que quienes les recibieron les reiteraron la posición de desconocimiento que respecto de su elección mantiene la referida comunidad, a pesar de lo cual una importante miembro del parlamento del viejo continente solicitará del señor Borrell las claridades pertinentes pues, a su juicio, el desconocimiento de la elección implica cero contacto con personajes como los visitantes y es ese punto, específicamente, el de mi interés.
La Unión Europea ha sostenido de manera reiterada que nuestra situación la debemos resolver los venezolanos de manera pacífica y constitucional y que, en tal virtud, todas las naciones que la integran están dispuestos a facilitar que así lo resolvamos. Si eso es así – y lo creo – resulta contradictorio el reclamo que se le hará al señor Borrell.
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En efecto, las circunstancias en las cuales fueron atendidos los visitantes evidencian cuál es la posición europea, la cual seguramente les fue reiterada en la reunión que tuvieron con el personal técnico de la oficina del señor Borrell, por lo que solo será posible suspender el desconocimiento que se tiene respecto de su actuar, cuando se celebren elecciones presidenciales y parlamentarias libres y observadas.
Si algo caracteriza el actuar ordinario del político es la utilización de la palabra, no para hablar con el espejo, sino con aquellos a quienes debe convencer de las bondades de su proceder; negarse a ello – o reclamarlo – es cuando menos sorprendente y a todas luces contradictorio.
El reclamo que expreso respecto de Europa vale muy bien para nuestros países latinoamericanos, principales impactados por nuestra migración. Quizás por ello resulta tan valiosa la posición asumida en Buenos Aires por el representante del Presidente Biden para nuestro conflicto, quien ponderó la posición porteña de nuestra situación pues estima que a través de ella es posible buscar acuerdos en nuestro conflicto.
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Es una pena – así lo creo – que nuestros hermanos latinoamericanos hubieren preferido atrincherarse en posiciones de respaldo de cada una de nuestras posiciones internas en lugar de buscar consensuar ellos una y a orientarnos a nosotros en tal sentido.
En todo caso, quienes quieran contribuir a la salida a nuestra situación bien harían en facilitar todo tipo de negociaciones que conlleven a ese objetivo. Hacer lo contrario fortalece a quienes usurpan posiciones pues así nada tienen que explicar.
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*Gonzalo Oliveros Navarro, Magistrado del Tribunal Supremo de Justicia. @barraplural