Las cosas son lo que son

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“Donald Trump no está en capacidad de convertirse en el hombre que necesitamos que sea”, dijo Michelle Obama en la Convención Nacional Demócrata. “Las cosas son lo que son”. Así, con esa sencillez que la caracteriza, pronunció la más condenatoria sentencia del presidente Trump jamás escuchada.

Aquí, estamos en mora de aceptar que las cosas son como son: Iván Duque tampoco es el mandatario que la circunstancias requieren. Como lo afirmó Michelle Obama de Donald Trump, “ha tenido más que suficiente tiempo para probar que puede hacer el trabajo, pero los requerimientos están por encima de sus posibilidades.” Duque no está a la altura del momento.

No es porque implemente políticas económicas que dan dádivas a los más ricos y castigan a los más pobres, como bien lo demostró la reforma tributaria.

No es porque haya entregado tanta representación a los gremios en el gobierno, con capacidad de definir políticas y estrategias, que hasta se pueda hablar de gobierno corporativo.

No es porque la apertura de la economía a la loca tolondra en medio de la crisis sanitaria nos tenga ocupando los primeros escalones del mundo en las listas de indicadores por millón de la pandemia.

No es porque haya ideologizado la política exterior a tal punto que el abandono de los espacios internacionales ganados con esfuerzo y trabajo en ocho años nos esté conduciendo al aislamiento.

No es porque su política de seguridad sea tal fracaso que nos haya tocado volvernos a acostumbrar a las madrugadas con noticias de una masacre tras otra en cruel déjà vu de los años 2000.

Todo lo anterior forma parte del legítimo debate democrático.

Pero sí es porque Iván Duque, el ser humano, es mucho menos de lo que Colombia merece. “La presidencia no cambia quién eres; revela quién eres”, afirmó Michelle Obama.

Y esto es lo que nosotros hemos visto de nuestro presidente:

Un hombre que ofreció un estadio a una comunidad que llora sus muertos, como si el cemento pudiera reemplazar la protección que este gobierno le niega.

Un hombre que decidió llamar “homicidios colectivos” a las masacres, como si, al cambiar de nombre, se pudiera minimizar la tragedia.

Un hombre que se demora en ofrecer unas palabras de aliento a las víctimas y se apresura a engañar con gráficos tramposos, como si la gente se redujera a números.

Un hombre que se aferra al espejo retrovisor, como si eso fuera una escapatoria para asumir las responsabilidades que lo superan.

Un hombre temeroso que quedó atrapado entre los radicales de su partido y la lealtad a su caudillo, como si, cediendo ante las presiones, pudiera obtener el aprecio que ellos mismos no le terminan de dar.

Un hombre que se presenta como lo más moderno de la política colombiana y le rinde pleitesía a lo más retrógrado de la derecha populista, como si el tiempo se hubiese detenido.

Un hombre que se resiste a ver que la política de hacer trizas la paz nos está llevando de regreso a lo peor de la guerra, como si la realidad se pudiera negar con el deseo.

Un hombre que, cuando podría haber unido, eligió dividir, como si él gobernara para unos pocos y no para los 44 millones de compatriotas.

Las palabras de Michelle Obama parecen escritas para Colombia. “Empatía… la capacidad de caminar en los zapatos de otra persona; el reconocimiento que la experiencia de otra persona también tiene valor. La mayoría de nosotros practica esto sin pensarlo dos veces. No es un concepto difícil de comprender. Es lo que les enseñamos a nuestros hijos”.

“Entiendo que mi mensaje no será escuchado por algunas personas. Vivimos en una nación que está profundamente dividida y yo soy una mujer negra hablando en la Convención Demócrata”, prosiguió Obama.”

Tengo la convicción de que un presidente incapaz de empatía no es digno de los colombianos. Pero, ¿qué sé yo? Solo soy una migrante nacionalizada que quiere a Colombia.

*Laura Gil, politóloga e internacionalista, directora de La Línea del Medio, @lauraggils

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7 COMENTARIOS

  1. Dra Laura gracias por sus análisis y comentarios tan acertados, por momentos pareciera que a Colombia la quieren mas los de Afuera que los propios. Somos una nación de incapaz de entender que está primero los intereses superiores de la patria antes que los particulares, frase que tanto usó el innombrable para como siempre manipular la conciencia política de una nación cansada de tanto dolor y sufrimiento a causa de la mesquindad y la lucha de clases; que lejos de buscar verdadera paz por el contrario ha sido el combustible para la locomotora de la guerra y el sufrimiento de una nación a manos de todo aquel que se pueda abrogar algo de fuerza y superioridad por encima de los más débiles e indefensos.

  2. Excelente análisis para unos instantes de unos países que son gobernados por unos líderes que no están a la altura de las circunstancias del momento, ni antes de las mismas. Les quedaron grande la misión.

  3. Ese es el perfil de un mandatario prisionero de un caudillo que ha cubierto de sufrimiento, miseria, violencia y pobreza a millones de colombianos y una logia fundamentalista que se hace llamar Centro Democrático, que no es ni centro y menos ha practicado la democracia. Hoy se observa una pequeña luz de justicia y ojalá la Corte interprete a los colombianos y lo juzgue del tamaño del daño ocasionado. Sus políticos y empresarios defensores deben dejar de presionar a magistrados y jueces. Ya llenaron sus bolsillos y su deseo de martirizar la nación. Necesitamos la paz

  4. Gracias Laura, por plasmar la condición humana mínima de hacerse sensible ante el dolor ajeno, tan distante del ser y el hacer de una persona tan incompetente como el actual presidente de la república ( en minúscula resaltada).

  5. Lastimosamente este señor debe todo lo que tiene y los intereses son muy altos y se ha convertido en un títere de tercera para tratar de aliviar la su deuda y estamos pagando todos los Colombianos

  6. tenemos una clase politica que no esta a la altura del pais estan a la altura de los mas grandes corruptos del mundo tenemos un presidente inepto que funge como el titere de un sociopata que esta acosrtumbrado a robar matar y hacer todo lo ilicito para lograr sus siniestros propositos como ordenarle al payaso duque prestar 375millones de dolares a la empresa quebrada del cual es socio el sociopata y alta ejecutiva su hermana sera que es posible recaudar los 375 millones o sera que esa es una deuda de dudoso recaudo
    ustedes creen que avianca piensa en devolver ese regalito

  7. es mi pensamiento como ciudadano que puede opinar libremente asumo mi responsabilidad y me falta decir muchas cosas mas y no rectifico nada

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