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La PAZ se negocia y firma con los actores armados, la ARMONÍA se construye, alimenta y desarrolla con la sociedad. Si yo fuera un actor armado y hubiese visto el bochornoso espectáculo de odio en las tribunas contra la hija del presidente durante el partido de fútbol no pensaría, nunca jamás, en desmovilizarme: prefiero ser un rey en la selva y no un perseguido, acorralado, vituperado y asesinado en medio de tanta inquina que se destila al interior de la sociedad colombiana. Los armados no tienen incentivos mayores para reincorporarse a la selva de cemento en la que cualquiera es el enemigo, en donde los rencores afloran en medio de la nada y te sorprenden en una esquina: con un sicario, con un cuchillo. Póngase en sus botas presidente y colegirá que no van a negociar porque se sienten más seguro en la manigua del Atrato que en el Centro Comercial Andino en Bogotá. Desista de la Paz Total, su promesa de campaña no se puede cumplir por ahora, al menos no por ese camino, y eso lo entenderán quienes votamos por usted, su loable persistencia lo está desgastando, quemando e incluso llevando a exabruptos -producto del desespero- como los de senador Cepeda que propuso penalidades para quienes se opusieran a la paz. A cambio de Paz Total hablemos de Armonía Constructiva en la que ya ha dado pasos enormes pero que por lo visto usted no valora su magnitud: la universidad en el Catatumbo, las 123 comunidades energéticas en La Guajira, las 269 obras para la vida en los municipios más vulnerables, la compra y optimización del Hospital San Juan de Dios, la entrega de tierras a comunidades despojadas, los proyectos de resocialización en las cárceles, entre otras, a las que deberían sumársele el mejoramiento de las carreteras terciarias, la reactivación del ferrocarril y del río Magdalena, la soberanía alimentaria en las comunidades, la reactivación de los medios comunitarios de comunicación, el proyecto piloto de la reforma a la salud en La Guajira (que por lo visto y por estar imbuido en la paz olvidó). Estas obras que propenden armonía ciudadana nos conducirá a la paz con los armados. Usted está siendo esclavo de sus promesas de campaña, tenga humildad y acepte que no todas se pueden cumplir por el camino trazado, pero que a cambio está explorando nuevas rutas para llegar al mismo propósito: el fin justifica los medios y eso lo comprenderán y asimilarán sus votantes.
*Roque Monteiro. comunicador social – periodista retirado, fotógrafo sin cámara, autor de varias novelas, cultivador de yuca y viajero incansable. Miembro del colectivo Psicolombianos de Diván.